Dennisse Montañez
La comunidad de San Luis Río Colorado se encuentra de luto tras el hallazgo del cuerpo sin vida de Sofía, una niña de tres años que fue reportada como desaparecida la noche del lunes 11 de agosto. Su cuerpo fue localizado en un canal cercano a su domicilio, lo que ha desatado un fuerte llamado de atención sobre la grave situación que enfrentan los menores en diversas regiones del país.
Los familiares de Sofía alertaron a las autoridades alrededor de las 8 de la noche cuando notaron que la pequeña había desaparecido. Elementos de la Policía Estatal y personal de rescate desplegaron una intensa búsqueda en las colonias cercanas, hasta que finalmente encontraron a la niña en un canal de aguas residuales a pocas cuadras del lugar donde se perdió su rastro. Las autoridades ya investigan si la muerte fue accidental o si hay indicios de algún delito.
El alcalde local, César Iván Sandoval Gámez, lamentó el suceso y anunció que este martes se realizará una ceremonia en memoria de Sofía, donde familiares y vecinos rendirán homenaje a la pequeña con globos blancos.
La familia de Sofía ha solicitado a medios de comunicación y a la ciudadanía evitar especulaciones, y piden respeto y privacidad para sobrellevar el duelo en este momento tan doloroso.
Este lamentable hecho se suma a dos episodios recientes que ponen en evidencia el alto riesgo que enfrentan los niños en México. En el Estado de México, Fernandito, un niño de cinco años, fue asesinado tras ser secuestrado por prestamistas que buscaban cobrar una deuda pendiente de su madre. En Morelos, la Fiscalía logró rescatar a otro niño de cinco años que había sido privado de su libertad en un operativo contra grupos criminales.
Activistas y organizaciones defensoras de los derechos infantiles han expresado su preocupación ante este patrón de violencia, que no sólo afecta a comunidades marginadas, sino que revela fallas graves en las políticas públicas para proteger a la infancia. Según cifras oficiales, cada día se reportan múltiples casos de violencia, desapariciones y abusos contra menores en México.
Las familias de las víctimas exigen justicia y un cambio profundo en las estrategias de prevención y atención, para que ningún niño más sea víctima de la inseguridad y la impunidad.
