Panda, un perro de pelaje color blanco y negro, nacido en la calle pero adoptado por los vecinos de la colonia Ampliación Chulavista era juguetón, regordete y al mismo tiempo protector de quienes desde cachorro lo adoptaron como suyo, sin embargo seres malvados se cruzaron en su camino y tras ofrecerle de comer empezó con una serie de estertores que ahora se sabe eran consecuencia de haber ingerido comida envenenada.
Los vecinos al notar que “Panda” se retorcía del dolor, trataron de auxiliarlo, incluso hicieron la “coperacha” para llevarlo al veterinario donde se quedó internado y bajo observación médica, sin embargo el esfuerzo de todos para poder salvar la vida de la mascota nada se pudo hacer para salvar su vida… el horror apenas empezaba
Panda, no fue la única víctima de quienes sin misericordia repartían comida envenenada para los perros de la zona, además otras dos mascotas murieron más tarde sin que sus propietarios pudieran hacer algo al respecto; el otro caso es el del “negro”, un perro criollo que también fue victima de los alimentos contaminados, como en el otro caso también fue llevado a un veterinario, pero fue demasiado tarde porque a pesar del tratamiento al que fue sometido murió.
Ante este escenario, piden a las autoridades que le den seguimiento al caso y que encuentren a los responsables, para evitar que se vuelva a presentar otro caso de envenenamiento, ya que aseguran hay temor entre los habitantes de la zona, de que también sus mascotas puedan ser víctima de comida contaminada con algún tipo de sustancia
El Código Penal del Estado de Morelos en el Título Vigésimo Tercero contempla los delitos contra la integridad y dignidad de los animales domésticos, penalizando en el ámbito de su competencia los actos de maltrato o crueldad en contra de cualquier animal doméstico; desde noviembre del 2021 el maltrato animal es considerado un delito en cuanto se aprobó la reforma el artículo 327 y 328 del Código Penal para el estado de Morelos.
Quien cometa un acto de maltrato o crueldad en contra de cualquier animal doméstico puede tener una sanción de tres meses a cuatro años de prisión y una multa de cincuenta a quinientas veces unidades de medida y actualización diaria vigente.
