Unidades del transporte público pertenecientes a la Ruta 9, con derrotero Trinchera–Paraíso en el municipio de Cuautla, suspendieron sus operaciones de manera repentina, presuntamente debido a un nuevo intento de extorsión por parte de grupos delictivos.
El hecho generó preocupación entre usuarios y transportistas, quienes denunciaron la situación a través de redes sociales.
De acuerdo con versiones de habitantes, los choferes decidieron detener el servicio ante las amenazas recibidas, lo que dificultó la movilidad hacia distintas colonias del municipio. Vecinos de Trinchera y Paraíso señalaron que los operadores habrían sido víctimas de intimidaciones por personas que exigían pagos para permitirles continuar trabajando, por lo que suspendieron el servicio para resguardar su integridad.
Esta no es la primera ocasión que la Ruta 9 enfrenta un paro por motivos similares; en octubre de 2024 las unidades también suspendieron su servicio tras reportarse casos de extorsión y amenazas contra conductores, lo que en ese momento derivó en operativos de seguridad temporales en algunos puntos de la ciudad.
Hasta el momento, ninguna autoridad municipal o estatal ha emitido un comunicado oficial sobre este nuevo incidente, aunque los usuarios exigen mayor presencia policial y estrategias de protección para el sector transportista, considerado uno de los más afectados por la inseguridad en la región oriente de Morelos.
