Durante el reciente Carnaval de São Paulo, la Policía Civil implementó una estrategia innovadora para combatir el robo de dispositivos móviles: agentes encubiertos se disfrazaron de personajes icónicos, como los Power Rangers y el Chapulín Colorado, para mezclarse entre los asistentes y sorprender a los delincuentes en flagrancia.
En una de las intervenciones más destacadas, oficiales vestidos como Power Rangers detuvieron a un hombre que había robado siete teléfonos celulares cerca del Parque Ibirapuera. El sospechoso actuaba junto a un cómplice que logró escapar y está siendo buscado por las autoridades. Tras la detención, se identificó el lugar donde la banda se hospedaba, encontrando otros cuatro dispositivos robados y 5,000 reales en efectivo.
En otra operación, agentes disfrazados del Chapulín Colorado y de sacerdote arrestaron a un individuo acusado de hurtar celulares en el centro de la ciudad durante el precarnaval. Estas tácticas buscan aprovechar el factor sorpresa y permitir a los policías actuar rápidamente en situaciones donde los delitos se cometen con gran rapidez.
Esta es la segunda ocasión en que la Policía Civil de São Paulo utiliza disfraces durante el carnaval para reforzar la seguridad y reducir los índices de criminalidad en eventos masivos. Durante las festividades de este año, se registraron 880 denuncias por robos de celulares en el primer fin de semana, una disminución significativa en comparación con las 2,344 ocurrencias del año anterior.
La implementación de disfraces por parte de las fuerzas del orden ha demostrado ser una estrategia efectiva para garantizar la seguridad de los ciudadanos durante eventos multitudinarios, sorprendiendo a los delincuentes y permitiendo una respuesta inmediata ante situaciones delictivas.
Con información de: Infobae y Cnn Brasil.