a
​​

De la universidad a la calle: la historia de Orlando

Cada día es una lucha para Orlando, se despierta bajo el puente sin saber qué va a suceder
Omar Maldonado 


La historia de una persona en situación de calle puede variar mucho de persona a persona, pero aquí les presentó la historia de Orlando, un hombre de 38 años con una historia muy peculiar que lo llevó a vivir bajo un puente. 

La caída en la adversidad 

Orlando había sido un hombre trabajador toda su vida, nació en una familia humilde en Chilpancingo, en el vecino estado de Guerrero, pero siempre tuvo claro que quería salir adelante. Trabajó desde muy joven y se esforzó por ahorrar dinero para estudiar y mejorar su situación, incluso fue a la Universidad donde estudió la carrera de turismo, misma que por diversas situaciones no pudo concluir.

La pérdida de todo 

Con el tiempo, Orlando; comenzó a perder su trabajo el cual era la venta de líneas telefónicas. Así fue como debido a la falta de motivación y la depresión se quedó solo en la calle, sin hogar, sin trabajo y sin familia, comenzó a mendigar para sobrevivir y se convirtió en uno de los muchos indigentes que vagan por las calles de la ciudad. 

Sin embargo, la vida le dio un giro inesperado viviendo en Chilpancingo, fue entonces que decidió tomar la drástica decisión de dejar todo atrás e iniciar una nueva vida en Cuernavaca, donde conoció a su pareja con la que actualmente vive bajo el puente “Ayuntamiento 2000” en pleno corazón de Cuernavaca. 

La lucha diaria 

Cada día es una lucha para Orlando, se despierta bajo el puente sin saber qué va a suceder, como casa tiene unas lonas y pasa frio debido al concreto del puente. Busca plásticos, cartón y otros materiales para la venta para su manutención, a veces encuentra trabajo esporádico, pero nunca es suficiente para salir de la pobreza. 

A pesar de todo, Orlando no ha perdido la esperanza, sueña con volver a tener una vida digna junto a su actual pareja, mientras tanto, sigue luchando por sobrevivir en una sociedad que a menudo lo ignora o lo rechaza. 

La resurrección 

Con el tiempo Orlando, ha logrado estabilizarse y aunque la cicatriz de la adversidad siempre estará presente ha encontrado una nueva razón para vivir, su pareja y sus cinco compañeros de aventuras, 5 perros que lo acompañan a todas partes y que ha bautizado como “Tribilin”, “Pluto”, “Micky” y “Daysi”. 

Su historia es un testimonio de la resiliencia humana y de la importancia de la solidaridad y el apoyo en momentos de necesidad. Orlando es un ejemplo de que, aunque la vida nos golpee siempre hay esperanza para levantarse y comenzar de nuevo. 

en
Omar Maldonado Sandoval 24 de octubre de 2024
Compartir



Categorías
FILTRO
Identificarse dejar un comentario
a
​​
Feministas piden aplicar "filtros" para comercios que se sumarán al programa "Código Violeta"
En Cuautla no funcionó, aseguran